¿Qué área de investigación sobre la diabetes cubre su proyecto? ¿Qué papel desempeñará este proyecto en particular en la prevención, el tratamiento y/o la cura de la diabetes?
El objetivo principal de mi proyecto es desarrollar nuevas pruebas para mejorar el diseño de futuros ensayos clínicos para la diabetes tipo 1. En concreto, proporcionar un método rápido y sólido para predecir con qué rapidez es probable que un individuo pierda las células productoras de insulina que le quedan tras el diagnóstico. Los diseños de ensayos actuales se ven obstaculizados por las tasas muy variables de progresión de la enfermedad tras el diagnóstico; aunque se pueden definir con seguridad resultados positivos para una población, es mucho más difícil determinar si algún individuo específico se ha beneficiado de una terapia experimental y, de ser así, en qué medida. Si tiene éxito, mi proyecto abordará esta brecha crítica de conocimiento, lo que potencialmente permitirá que los participantes sirvan como sus propios controles. También permitiría diseños de estudio mucho más flexibles con duraciones más cortas, acelerando así un resultado exitoso para la búsqueda de una verdadera cura para la diabetes tipo 1.
Si una persona con diabetes le preguntara cómo su proyecto la ayudará en el futuro, ¿cómo respondería?
Si mi proyecto tiene éxito, debería acelerar el descubrimiento de terapias eficaces para detener o ralentizar la destrucción de las células productoras de insulina en personas con un diagnóstico reciente de diabetes tipo 1. Por lo tanto, mi respuesta a esta pregunta depende de cuánto tiempo lleva padeciendo diabetes la persona que la formula, ya que esto determinará la probabilidad de que pueda beneficiarse directamente de mi investigación. Por lo tanto, si la persona ha padecido diabetes tipo 1 durante menos de 3 años y está progresando lentamente, entonces podría decirle que existe la posibilidad de que mi proyecto pueda facilitar nuevos tratamientos que mejorarían su calidad de vida y sus resultados de salud. Sin embargo, si hubiera padecido diabetes tipo 1 durante más tiempo, entonces lamentablemente tendría que informarle que es poco probable que se beneficie directamente de mi proyecto, ya que probablemente requeriría una forma de tratamiento diferente a la que afectaría mi proyecto. Sin embargo, en cualquier caso también les recordaría que la diabetes tipo 1 a menudo se da en familias y, por lo tanto, si bien mi investigación puede no beneficiarlos directamente, existe una buena posibilidad de que pueda beneficiar a un miembro de la familia que aún no tiene diabetes tipo 1 clínica, pero está en riesgo de desarrollarla en el futuro, al acelerar el descubrimiento de terapias más efectivas e identificar el tratamiento o los tratamientos que serían más apropiados para ellos.
¿Por qué es importante para usted, personalmente, involucrarse en la investigación sobre la diabetes? ¿Qué papel desempeñará este premio en sus esfuerzos de investigación?
Durante los últimos 20 años he sido miembro del cuerpo docente del mundialmente conocido Centro Barbara Davis para la Diabetes Infantil, donde he llevado a cabo investigaciones básicas y traslacionales destinadas a mejorar la calidad de la atención y los resultados sanitarios de las personas con diabetes tipo 1 o en riesgo de desarrollarla. Aunque ni yo ni ningún miembro de mi familia inmediata padecemos diabetes, estoy plenamente comprometido con la participación en la investigación sobre la diabetes, y la misión rectora de mi carrera reciente ha sido la de realizar contribuciones significativas a la búsqueda de curas verdaderas para estas enfermedades devastadoras. Este premio actual me permitirá aprovechar al máximo los avances tecnológicos recientes para convertir mi investigación en una forma que sea adecuada para su uso en un entorno clínico en lugar de totalmente académico, donde potencialmente puede ser de beneficio directo para las personas con un diagnóstico reciente de diabetes tipo 1.
¿Hacia dónde cree que se dirige el futuro de la investigación sobre la diabetes?
Mi expectativa es que la investigación futura sobre la diabetes se centrará más en el individuo que en el grupo en su conjunto. Está claro que la diabetes es mucho más heterogénea de lo que se pensaba anteriormente, lo que sugiere que, en última instancia, se requerirá una variedad de opciones de tratamiento, en lugar de una única "fórmula mágica", para proporcionar una atención clínica totalmente inclusiva y eficaz a cualquier persona con diabetes. Se han logrado avances considerables, pero para que esto se convierta en realidad, preveo que la investigación deberá centrarse en al menos tres áreas distintas. En primer lugar, aprovechar los avances en "inteligencia artificial" y "big data" para describir con mayor precisión qué mecanismo(s) regulador(es) se han desequilibrado en un individuo en particular que lo ha llevado a desarrollar diabetes clínica o preclínica, y desarrollar medicamentos específicos o intervenciones en el estilo de vida para corregirlos. En segundo lugar, identificar métodos mejorados para regenerar o rejuvenecer las propias células productoras de insulina del individuo, o reemplazarlas utilizando, en la medida de lo posible, sustitutos derivados de las propias células de la persona. En tercer lugar, desarrollar algoritmos personalizados y tecnologías más biocompatibles y asequibles para brindar acceso equitativo a un “páncreas artificial” eficaz para aquellos a quienes les resulta imposible proteger, reparar o reemplazar su fuente natural de insulina.