El ejercicio es esencial para todos, especialmente para las personas con diabetes. Estar activo la mayoría de los días de la semana lo mantiene saludable al reducir los riesgos de salud a largo plazo, mejorar la sensibilidad a la insulina y mejorar el estado de ánimo y la calidad de vida en general. La mayoría de las veces, hacer ejercicio hace que baje la glucosa en sangre (azúcar en sangre). Pero algunas personas, después de ciertos tipos de ejercicio, notan que sus niveles de glucosa en realidad aumentan durante o después del ejercicio. ¡No tema! Hay medidas que puede tomar para evitar esto.
La adrenalina puede aumentar los niveles de glucosa en sangre
El uso de los músculos ayuda a quemar glucosa y mejora el funcionamiento de la insulina. Por eso, los niveles de glucosa en sangre suelen bajar durante el ejercicio, pero también es posible que aumente después de realizarlo. Algunos ejercicios, como el levantamiento de pesas, los sprints y los deportes competitivos, hacen que produzcas hormonas del estrés (como la adrenalina). La adrenalina aumenta los niveles de glucosa en sangre al estimular el hígado para que libere glucosa.
Los alimentos que consumes antes o durante el entrenamiento también pueden contribuir a un aumento de la glucosa. Si comes demasiados carbohidratos antes de hacer ejercicio, es posible que tu sesión de sudoración no sea suficiente para mantener tu nivel de glucosa en sangre dentro del rango objetivo.
Estrategias para evitar que la glucosa en sangre aumente durante los entrenamientos
Ahora que ya sabe qué provoca un aumento de la glucosa en sangre después o durante el ejercicio, puede esperarlo y aceptarlo durante su próxima sesión de entrenamiento porque sabe que los beneficios del ejercicio superan el aumento de la glucosa. Pero si prefiere evitarlo por completo, aquí hay algunas estrategias que pueden resultarle útiles:
- Elija entrenamientos aeróbicos de intensidad moderada o entrenamiento con pesas en circuito con pesas livianas y muchas repeticiones.
- Practique técnicas de relajación como la respiración pausada, la visualización o la meditación antes y durante su entrenamiento para minimizar el efecto de la adrenalina.
- Considere realizar su entrenamiento más tarde en el día si normalmente hace ejercicio temprano en la mañana. El fenómeno del amanecer, un aumento natural de la glucosa en sangre que ocurre entre las 4:00 y las 8:00 a. m., puede resultar en niveles más altos durante el ejercicio matutino. Es menos probable que el mismo entrenamiento realizado más tarde en el día resulte en un aumento.
- Hable con su médico sobre la posibilidad de ajustar su insulina de acción rápida u otros medicamentos de acción corta para la diabetes antes de las sesiones de entrenamiento que generalmente provocan un aumento de la glucosa.
- Evite ingerir cantidades excesivas de carbohidratos antes y durante sus entrenamientos. En su lugar, pruebe un poco de yogur con nueces o mantequilla de maní.
Ejercicio y glucosa en sangre: consejos para llevar
La actividad física es importante para todas las personas con diabetes. La mayoría de las formas de ejercicio aeróbico/cardiovascular reducirán los niveles de glucosa, mientras que actividades como el entrenamiento de alta intensidad y el levantamiento de pesas pueden aumentarlos. Es posible controlar los niveles de glucosa con cualquier forma de ejercicio una vez que comprenda sus patrones personales (realizar controles regulares de glucosa en sangre y llevar un registro de ejercicios puede ayudar) y hacer ajustes que tengan sentido para usted y su estilo de vida.