Aumentar el nivel de actividad es muy bueno para la diabetes y para la salud en general, pero debe ser una experiencia agradable y segura. A continuación, se indican algunas cosas sencillas que puede hacer para ayudar a prevenir lesiones, deshidratación e hipoglucemia al hacer ejercicio:
- Si nunca ha estado activo o no lo ha estado durante un tiempo, comience lentamente. Si no está seguro sobre su salud, hable con su equipo de atención médica sobre qué actividades son más seguras para usted.
El consejo de su proveedor de atención médica dependerá del estado de su corazón, vasos sanguíneos, ojos, riñones, pies y sistema nervioso. Aun así, muchas personas con diabetes pueden realizar las mismas actividades que una persona sin diabetes. - Caliente durante 5 minutos antes de comenzar a hacer ejercicio y enfríe durante 5 minutos después.
El calentamiento o el enfriamiento deben ser de menor intensidad que el resto del tiempo que hace ejercicio. Esto ayuda a que la sangre circule y calienta las articulaciones. - Evite realizar actividades en temperaturas extremadamente altas o bajas. Elija opciones en interiores cuando el clima sea extremo.
- Beba mucha agua antes, durante y después de la actividad para mantenerse hidratado.
- Si siente que se acerca un nivel bajo de glucosa en sangre, prepárese para hacerse una prueba y tratarla. Lleve siempre consigo una fuente de carbohidratos para estar preparado para tratar la hipoglucemia (también conocida como hipoglucemia). Esto es especialmente importante si toma insulina y tiene diabetes tipo 1.
- Si hace ejercicio durante un período prolongado (más de una o dos horas), es posible que desee tomar una bebida deportiva que proporcione carbohidratos. Sin embargo, tenga cuidado de verificar la información nutricional, ya que es posible que deba diluir la bebida para no tomar demasiada, lo que puede provocar un aumento repentino del nivel de azúcar en sangre.
- Use una pulsera de identificación médica, un collar o una etiqueta de identificación médica que lo identifique como alguien con diabetes en caso de emergencia y lleve consigo un teléfono celular en caso de que necesite llamar a alguien para pedir ayuda.
- Las actividades deben ser estimulantes pero no excesivamente difíciles.
Utilice la “prueba del habla” para asegurarse de que no se está esforzando demasiado. Si le falta el aire y no puede hablar, disminuya el ritmo. Esto es muy importante cuando recién está comenzando a aumentar la actividad en su rutina. A medida que se ponga en forma, podrá hacer ejercicio a mayor intensidad y conversar con otras personas mientras lo hace. - Cuida tus pies usando zapatos y calcetines limpios que te queden bien.
También debes revisar el interior de tus zapatos antes de usarlos. Los zapatos con gel de sílice o entresuelas de aire son una buena opción para actividades que requieren soportar peso, como caminar, porque están diseñados para reducir la tensión en los pies y las articulaciones. Los calcetines que están hechos de un material que reduce la fricción y aleja la humedad de la piel también pueden ayudar a proteger tus pies. Algunos ejemplos son CoolMax, polipropileno o acrílico (evita el algodón). - Inspeccione cuidadosamente sus pies antes y después de la actividad para detectar ampollas, enrojecimiento u otros signos de irritación. Hable con su médico si tiene una lesión en el pie o una ampolla, un corte o una llaga que no cicatriza.
- Deje de hacer una actividad si siente dolor, dificultad para respirar o mareos. Hable con su médico sobre cualquier síntoma inusual que experimente.